Por Daina Beth Solomon
10 feb (Reuters) – El líder opositor nicaragüense Juan Sebastián Chamorro relató el viernes su viaje relámpago a Washington desde la prisión El Chipote, en Managua, tras ser sacado de su celda en plena noche y empujado a un autobús.
En lugar de ser trasladado a otra prisión, como esperaba, el excandidato presidencial fue subido a un avión con otros 221 destacados críticos del Gobierno y trasladado a Washington.
“Fue en ese momento (cuando el autobús entraba en el aeropuerto) cuando me di cuenta -todos nos dimos cuenta- de que no íbamos a la cárcel Modelo, sino fuera del país”, declaró Chamorro en una conferencia de prensa en Internet. “No nos lo dijeron hasta que llegamos a la pista”, detalló.
Un año y ocho meses después de su detención, estaba en libertad. “Fue una especie de momento agridulce, salir del país en ese avión, dejar Nicaragua, pero al mismo tiempo, ser libre”, confesó.
El vuelo, que todos los presos liberados menos dos aceptaron tomar, marcó el final de un largo periodo de incertidumbre en torno a los planes del presidente nicaragüense Daniel Ortega para sus críticos encarcelados de alto perfil.
Muchos de los contendientes presidenciales, líderes empresariales, periodistas y activistas estudiantiles fueron arrestados en los meses previos a las elecciones de noviembre de 2021, una votación en la que Ortega se aseguró un cuarto mandato consecutivo y que Estados Unidos definió como una “farsa”.
“Al final, la presión política de los presos políticos se convirtió en una carga para el régimen de Ortega”, opinó Chamorro, que proviene de una influyente familia nicaragüense y había esperado desbancar al exguerrillero marxista, como presidente. “Quería echar a la oposición del país”, añadió.
Chamorro se enteró al llegar a suelo estadounidense de que el mandatario había tomado entretanto medidas para despojar a los presos liberados de su ciudadanía, echando por tierra cualquier esperanza de regresar a casa mientras Ortega siga en el poder.
“Empezó con la ilegalidad (…) y terminó con la ilegalidad”, dijo Chamorro. “Muy típico de una dictadura loca como la de Ortega”.
El gobernante ha descrito la liberación como un impulso para expulsar a provocadores criminales que buscaban socavar Nicaragua.
Félix Maradiaga, otro aspirante presidencial que también fue arrestado en junio de 2021, describió la rápida serie de acontecimientos que condujeron a su liberación como “orwelliana” después de meses sin apenas contacto con sus abogados o con el mundo exterior.
Añadió que no estaba preparado para hablar de cómo era dentro de la prisión El Chipote, pero agregó: “Ningún ser humano debería estar en estas condiciones”.
(Reporte de Daina Beth Solomon; Editado en español por Raúl Cortés Fernández)