SÍDNEY, 20 feb (Reuters) – El Banco Central de Australia necesita más tiempo para estar seguro de que la inflación está disminuyendo antes de poder descartar otra subida de los tipos de interés, aunque la ralentización del consumo estaba devolviendo a la economía a un mejor equilibrio.
Las actas de su reunión del 5 y 6 de febrero, publicadas el martes, mostraron que el Banco de la Reserva de Australia (RBA) consideró la posibilidad de subir los tipos otro cuarto de punto, pero decidió mantenerlos estables dado que se habían hecho progresos en la inflación y el mercado laboral estaba mejorando más rápido de lo esperado.
Sin embargo, “los miembros señalaron que pasaría algún tiempo antes de que pudieran tener suficiente confianza en que la inflación volvería al objetivo en un plazo razonable”, mostraron las actas.
Dada la considerable incertidumbre sobre las perspectivas económicas y los elevados costes de que la inflación se muestre obstinada, el Consejo de Gobierno acordó no descartar una nueva subida del tipo de interés.
Los miembros sí señalaron que el mercado laboral y el gasto de los consumidores habían sido más débiles de lo previsto, y que existía el riesgo de que el gasto de los consumidores se debilitara más de lo que lo había hecho hasta la fecha.
El Banco de la Reserva de Australia ha subido los tipos de interés la friolera de 425 puntos básicos desde mayo de 2022, hasta el 4,35%, para frenar unos precios desbocados, lo que ha elevado los pagos hipotecarios en miles de dólares al mes.
(Reporte de Stella Qiu; editado en español por José Muñoz)