Por Stefanie Eschenbacher y Adriana Barrera
CIUDAD DE MÉXICO, 31 ene (Reuters) – El equipo del multimillonario mexicano Carlos Slim y la petrolera estatal Pemex están discutiendo cambios sustanciales a un acuerdo para desarrollar el primer campo de gas natural en aguas profundas del país, dijeron a Reuters cinco fuentes familiarizadas con el asunto. Grupo Carso, de Slim, firmó un acuerdo el año pasado para asociarse con Pemex y desarrollar el campo Lakach, en el Golfo de México, buscando revivir un proyecto que la estatal había abandonado dos veces debido a los altos costos.
Desde entonces, la relación de México con Estados Unidos se ha tensado por las amenazas del presidente estadounidense Donald Trump de imponer aranceles, deportaciones masivas y ataques militares a los cárteles de la droga.
En respuesta, el gobierno de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha redoblado sus esfuerzos, que comenzaron bajo su predecesor durante la primera presidencia de Trump, para reducir la dependencia del país de las importaciones de gas de Estados Unidos.
Representantes de Pemex y Grupo Carso han discutido en los últimos meses diferentes esquemas para hacer rentable Lakach, en medio de un precio de gas más bajo de lo que habían proyectado inicialmente, dijeron las fuentes.
Grupo Carso quiere añadir dos yacimientos cercanos a Lakach con recursos esperados similares, Piklis y Kunah, para aumentar la rentabilidad potencial de la empresa, dijeron cuatro de las fuentes.
No estaba claro en qué medida la adición de los dos campos, que dos fuentes dijeron estaba cerca de ser concretada, elevaría el precio de una inversión que dijeron le haría ganar a Slim influencia política sustancial.
Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Un portavoz de Slim declinó hacer comentarios. Las fuentes pidieron no ser identificadas porque no estaban autorizadas a hablar públicamente sobre el asunto.
En los últimos años, Slim ha aumentado su participación en el sector energético, con participaciones en los yacimientos de aguas someras de Zama, Ichalkil y Pokoch.
Piklis y Kunah, cada uno de los cuales tiene dos pozos perforados, fueron declarados prioridades estratégicas por el gobierno de Sheinbaum el año pasado, en un momento en que Pemex, un gigante en crisis, pretende aumentar su producción total de gas hasta los 5,000 millones de pies cúbicos al día (pcd), frente a los actuales 3,700 millones de pcd.
El equipo de Slim también planteó la posibilidad de congelar la operación o retirarse, según tres fuentes, en lo que una de ellas añadió que se trataba de una estrategia de negociación para lograr un mejor acuerdo.
Los primeros planes de desarrollo del yacimiento preveían su puesta en marcha en 2026 y un periodo de producción relativamente corto, de ocho años, según los registros oficiales. Ahora ese plazo parece improbable, según las fuentes.
El yacimiento, situado a unos 90 kilómetros del puerto de Veracruz, en el Golfo de México, contiene unos 900,000 millones de pies cúbicos de gas.
Lakach necesita mucha más inversión, añadió otra fuente, que revisó los planes de desarrollo. La presión es baja en el pozo productor existente, lo que dificulta la producción.
Otros siete pozos perforados desde 2007 están en “abandono temporal”, según los registros oficiales.
Hasta ahora, Pemex ha gastado 1,400 millones de dólares en él y el regulador le autorizó a gastar otros 400 millones.
La caída de los precios del gas ha dificultado aún más la rentabilidad de la inversión.
El precio de referencia del gas natural Henry Hub se sitúa actualmente en torno a los tres dólares por millón de BTU, lo que supone un tercio menos que hace un año y está muy por debajo de los seis dólares por millón de BTU previstos inicialmente para el proyecto, según una de las fuentes.
CONGELACIÓN PROFUNDA
Aparte de la perspectiva de que el regreso de Trump reconfigure por completo los lazos entre los dos vecinos, México tiene otras razones para buscar la independencia energética.
El suministro desde el norte se ha visto interrumpido anteriormente por otros motivos. En 2021, los cortes de energía en Texas causados por una profunda helada se prolongaron durante una semana. El gobernador republicano, Greg Abbott, ordenó a sus proveedores de gas natural que no realizaran envíos fuera del estado.
Las exportaciones de gas a México por gasoducto cayeron cerca de un 75%.
Pero desarrollar los recursos propios de México no es sencillo.
Pemex quiere explotar el yacimiento marino mediante un contrato de servicios en el que los socios financian los proyectos por adelantado, un mecanismo utilizado antes de la liberalización del sector energético del país, que fue restringida por el predecesor de Sheinbaum, López Obrador, un nacionalista en materia energética.
La explotación de Lakach exigirá recursos y experiencia a las empresas privadas, cuya participación ha intentado limitar el Gobierno en los últimos años.
La falta de infraestructura para canalizar el gas es otro problema, según las fuentes.
Los planes para producir gas del yacimiento se archivaron por primera vez en 2016 y de nuevo tras la retirada del anterior socio, New Fortress Energy, en 2023.
(Reporte de Stefanie Eschenbacher y Adriana Barrera; editado por Christian Plumb y Simon Webb)