WASHINGTON, 14 feb (Reuters) – Las ventas minoristas en Estados Unidos cayeron más de lo esperado en enero, probablemente porque las gélidas temperaturas alejaron a los consumidores de los concesionarios de automóviles.
Las ventas minoristas bajaron un 0,9% el mes pasado, tras un aumento revisado al alza del 0,7% en diciembre, informó el viernes la Oficina del Censo del Departamento de Comercio. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que las ventas minoristas, que son sobre todo de bienes y no se ajustan a la inflación, caerían un 0,1%.
El mes pasado, gran parte del país estuvo cubierto por tormentas de nieve y temperaturas bajo cero. Los incendios forestales de California también podrían haber afectado a las ventas.
Parte del descenso se debió probablemente tras cuatro meses consecutivos de fuertes subidas, en parte como reflejo de las compras preventivas de los consumidores en previsión de los aranceles a las importaciones, que elevarían los precios de los productos.
El arancel del 25% sobre los productos mexicanos y canadienses se retrasó hasta marzo. Este mes entró en vigor un gravamen adicional del 10% sobre los bienes procedentes de China.
El gasto sigue respaldado por la resistencia del mercado laboral, que mantiene elevado el crecimiento de los salarios y la expansión económica. La riqueza de los hogares está en máximos históricos gracias a los elevados precios de la vivienda, aunque el mercado bursátil ha cedido algunas ganancias.
Las ventas al por menor, excluidos los automóviles, la gasolina, los materiales de construcción y los servicios alimentarios, disminuyeron un 0,8% el mes pasado, tras un aumento revisado al alza del 0,8% en diciembre.
Las llamadas ventas minoristas subyacentes se corresponden más estrechamente con el componente de gasto de los consumidores del Producto Interno Bruto. Los economistas proyectaban un alza de las ventas minoristas subyacentes del 0,3%, tras el aumento del 0,7% registrado en diciembre.
La solidez del gasto de los consumidores contribuyó a compensar el lastre que supuso para el PIB la casi desaparición de los inventarios en el cuarto trimestre. La economía creció a un ritmo anualizado del 2,3% el pasado trimestre, tras haberse expandido un 3,1% en el periodo julio-septiembre.
El buen comportamiento del gasto del consumidor el pasado trimestre lo sitúa en una trayectoria de mayor crecimiento en el periodo enero-marzo.
(Reporte de Lucia Mutikani; Editado en Español por Manuel Farías)