7 mar (Reuters) – Las nuevas políticas bajo el Gobierno de Trump están colocando a la economía de Estados Unidos en un “flujo increíble”, dijo el jueves el presidente del Banco de la Reserva Federal de Atlanta, Raphael Bostic, y sugirió que es poco probable que la Fed tenga la claridad suficiente para moverse sobre los tipos de interés antes de finales de la primavera o el verano boreales.
“Se está produciendo una gran transición y en medio de esta transición es difícil saber exactamente dónde van a aterrizar las cosas”, dijo Bostic en un acto organizado por el Birmingham Business Journal.
Bostic enumeró una lista que incluía aranceles, política comercial, repuntes impredecibles de la inflación, una confianza del consumidor que se está volviendo negativa, la política de inmigración y su impacto en la mano de obra, la política energética, la política fiscal, el gasto federal y la geopolítica.
“Me sorprendería que tuviéramos mucha claridad antes de finales de primavera o principios de verano”, dijo. “Tendremos que ser realmente pacientes”.
La Reserva Federal celebrará su próxima reunión los días 18 y 19 de marzo. Se espera que los dirigentes monetarios mantengan los costos de endeudamiento a corto plazo en su rango actual de 4,25%-4,50%.
El presidente Donald Trump, desde que asumió el cargo en enero, ha introducido una serie de medidas arancelarias seguidas de retrocesos parciales o exenciones que han sacudido la industria y los mercados financieros y han contribuido a las apuestas de los mercados financieros sobre recortes de tipos de la Fed adelantados y adicionales.
Los contratos de futuros sobre tipos de interés prevén ahora una probabilidad más que equilibrada de que la Reserva Federal reanude los recortes de los tipos de interés a corto plazo en mayo, con dos reducciones más a lo largo del año. A finales del año pasado, los dirigentes de la Reserva Federal habían previsto sólo dos recortes de tipos este año.
Bostic dijo que los aranceles significarán precios más altos en algún momento para los hogares estadounidenses, que ya han tenido dificultades con costes elevados, aunque si eso se traduce en una mayor inflación “es una pregunta abierta”.
Otras políticas del nuevo Gobierno, como la desregulación y la producción de energía, están alimentando el optimismo empresarial, afirmó.
Después de que la Reserva Federal recortara los tipos un punto porcentual el año pasado, Bostic dijo que empezó este año pensando que necesitaría algún tiempo para evaluar el estado de la economía antes de apoyar cualquier otra medida.
“Si antes estaba esperando a ver y obtener una señal clara de hacia dónde va a ir la economía, ahora definitivamente estoy esperando, porque la dirección está muy en el aire”, dijo Bostic. “La pregunta es: ¿cómo se resuelve todo esto? ¿Y cuál es la secuencia de cosas que se ponen en marcha? ¿Cuáles son las respuestas? Y luego, ¿cómo se suma todo?”
(Información de Ann Saphir; edición de Leslie Adler; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)
