Por Ted Hesson y Jason Lange
WASHINGTON, 26 mar (Reuters) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, obtiene mejor calificación por su enfoque de línea dura hacia la inmigración que por su manejo de la economía, la política exterior u otros temas, según sondeos de Reuters/Ipsos, mientras el republicano intenta aumentar las detenciones y deportaciones.
Alrededor de la mitad de los encuestados estadounidenses en sondeos recientes aprobaron el enfoque de Trump sobre la inmigración, en comparación con poco más de un tercio que pensó que estaba haciendo un buen trabajo lidiando con el alto costo de la vida, el otro gran tema de su campaña para 2024.
Los estadounidenses han adoptado una visión más dura de la inmigración desde que Trump irrumpió por primera vez en la escena política nacional en 2015, y los últimos resultados de la encuesta muestran que la inmigración es el tema en el que obtiene su mayor nivel de apoyo, tanto entre su base republicana como entre los independientes políticos.
La última encuesta también mostró que los estadounidenses eran casi dos veces más propensos a considerar la economía como una prioridad principal que la inmigración, en una potencial señal de advertencia para Trump.
Alrededor del 86% de los republicanos aprobaban las medidas de Trump en materia de inmigración, mientras que el apoyo de los republicanos a su planteamiento sobre el coste de la vida se situaba en torno al 69%, según la última encuesta de Reuters/Ipsos, realizada entre el 21 y el 23 de marzo.
Trump puso en marcha una amplia campaña de represión tras asumir el cargo el 20 de enero, enviando tropas militares a la frontera entre Estados Unidos y México y reasignando agentes federales para ayudar en la aplicación de las leyes de inmigración.
Su Gobierno ha incrementado las detenciones y ha abierto nuevas rutas para deportar a los inmigrantes, a pesar de que las deportaciones han sido inferiores a las del anterior presidente, el demócrata Joe Biden.
El presidente también ha apuntado a la inmigración legal, intentando congelar el programa estadounidense de reasentamiento de refugiados y revocar visados y tarjetas verdes de estudiantes que participaron en protestas propalestinas. En una orden ejecutiva, Trump intentó restringir la ciudadanía automática por derecho de nacimiento, lo que desencadenó una batalla legal.
Desde que asumió el cargo, el índice de aprobación general de Trump se ha mantenido en gran medida estable, con poco menos de la mitad de los encuestados por Reuters/Ipsos aprobando su desempeño como presidente, incluido el 45% en la última encuesta de Reuters/Ipsos. Esta cifra es superior a la de la mayor parte de su primer mandato y a la de Biden.
Alrededor del 49% de los encuestados en el último sondeo aprueban su actuación en materia de inmigración, frente a un 38% de aprobación de la economía estadounidense, un 34% en relación al coste de la vida en el país y un 37% de la política exterior.
(Reportaje de Ted Hesson y Jason Lange; Edición de Scott Malone y Deepa Babington, Editado en español por Juana Casas)
