SHANGHÁI, 8 abr (Reuters) – El yuan chino cayó el martes a su nivel más bajo desde 2023 después de que el banco central aflojara ligeramente su control sobre la moneda, una medida que, según los analistas, constituye un intento de contrarrestar el revés que supone para las exportaciones la intensificación de la guerra comercial mundial.
La escalada de la disputa arancelaria entre las dos mayores economías del mundo mostró pocos síntomas de disminuir. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con aumentar aún más los aranceles sobre China, después de los contraaranceles anunciados por Pekín tras los elevados gravámenes impuestos a los productos chinos por Trump.
“Después de que el mercado viera las firmes represalias de China el viernes, la expectativa de que China eventualmente devalúe la moneda ha aumentado y la presión no desaparecerá fácilmente”, dijo Ju Wang, jefe de estrategia de divisas y tasas para la Gran China en BNP Paribas.
Un yuan más débil abarataría las exportaciones y aliviaría en cierta medida la presión sobre el comercio chino y la economía en general, pero una fuerte caída podría alimentar una presión no deseada de salida de capitales y poner en riesgo la estabilidad financiera, señalaron algunos analistas y economistas.
“La postura más radical de Pekín sobre los aranceles de Estados Unidos podría alinearse con un cierto ablandamiento del yuan para absorber mejor los choques entrantes”, Vishnu Varathan, jefe de análisis macro para Asia (excluyendo Japón) en Mizuho Bank.
“Pero el Banco Popular de China no deseará ni buscará una depreciación brusca, ya que la estabilidad financiera es importante”.
Antes de la apertura del mercado, el banco central fijó el tipo de cambio medio , en torno al cual el yuan puede cotizar en una banda del 2%, en 7,2038 por dólar, el nivel más bajo desde el 11 de septiembre de 2023, pero por encima de la estimación de Reuters de 7,3321.
Los participantes en el mercado han estado esperando para ver en qué momento el banco central permitirá que el punto medio oficial caiga más allá del nivel clave de 7,2 por dólar, ya que eso podría abrir el camino para una caída a 7,35, un nivel visto por última vez en 2023. Supondría además la fijación más baja del yuan desde la crisis financiera mundial de 2008.
(Reporte de la redacción de Shanghái; edición de Vidya Ranganathan, Shri Navaratnam y Lincoln Feast; editado en español por Tomás Cobos)