ROMA, 15 abr (Reuters) – Rusia no parece tomar en serio la búsqueda de la paz en Ucrania a pesar de las presiones de Washington, dijo a Reuters el ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto, en una entrevista en la que también expresó su enfado por los ataques israelíes contra Gaza.
El Gobierno conservador de Italia está ideológicamente alineado con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y a diferencia de muchas otras naciones europeas, se ha negado a criticar sus políticas.
No obstante, aunque Roma ha acogido con satisfacción los esfuerzos de Estados Unidos para garantizar el fin de la guerra de tres años en Ucrania, los ministros han expresado su preocupación en privado por la forma en que Trump ha tratado a Kiev y han advertido abiertamente de que Rusia podría intentar engañarla.
“Nada ha cambiado con los rusos”, dijo Crosetto, políticamente muy cercano a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. “Está claro que los rusos quieren continuar con los ataques como lo han hecho en los últimos tres años”, añadió.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, dijo el martes que no era fácil ponerse de acuerdo con Estados Unidos sobre un posible acuerdo de paz, y añadió que Moscú no caería en una trampa diplomática.
Subrayando la cercanía de Italia al Gobierno de Trump, Meloni hablará con el presidente estadounidense en Washington el jueves y luego volverá directamente a Italia para ver al vicepresidente JD Vance, que está de visita en Roma durante la Pascua.
Italia, al igual que Estados Unidos, ha apoyado firmemente a Israel durante su invasión de Gaza tras el ataque del 7 de octubre de 2023 de milicianos de Hamás contra comunidades del sur de Israel.
Sin embargo, Crosetto criticó las recientes acciones israelíes en el enclave palestino, como el ataque a un hospital y otros ataques en los que murieron civiles, incluidos paramédicos.
“Para mí, un niño palestino vale tanto como un niño ucraniano o un niño italiano. Un hospital palestino vale tanto como un hospital ucraniano o un hospital italiano”, afirmó, y añadió que Israel debe reconocer sus errores.
“A veces hay que tener el valor de decir ‘lo siento'”.
El ministro dijo que lamentaba el fin del alto el fuego el mes pasado y que le preocupaba que la violencia pudiera extenderse más allá de Gaza.
“Gaza es un estanque en el que cada día se arroja una piedra y los círculos que esta piedra crea se ensanchan cada vez más”, dijo, refiriéndose concretamente a la amenaza de guerra con Irán.
(Información de Angelo Amante y Crispian Balmer; edición de Frances Kerry; edición en español de María Bayarri Cárdenas)