(Reuters) -Explosiones e incendios sacudieron el martes Puerto Sudán, la capital sudanesa en tiempos de guerra, según un testigo, en el marco de un asalto de varios días con drones que incendió los mayores depósitos de combustible del país y dañó su principal puerta de entrada de ayuda humanitaria.
Los ataques incluyeron un ataque con vehículos aéreos no tripulados por parte de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) de Sudán contra las instalaciones de la ciudad, dirigido contra la terminal de contenedores, informó la empresa británica de seguridad marítima Ambrey.
Los ataques fueron los más intensos desde que comenzó el ataque a Puerto Sudán el domingo, en un conflicto en el que los aviones no tripulados han desempeñado un papel cada vez más importante, ayudando a los avances del ejército a principios de este año.
Según un testigo, salían enormes columnas de humo negro de los principales depósitos estratégicos de combustible del país, situados cerca del puerto y del aeropuerto, mientras que los ataques también alcanzaron una subestación eléctrica y un hotel cercano a la residencia presidencial.
La destrucción de las instalaciones de combustible y los daños sufridos por el aeropuerto y el puerto corren el riesgo de intensificar la crisis humanitaria de Sudán, que la ONU califica como la peor del mundo, al estrangular las entregas de ayuda por carretera y afectar a la producción de electricidad y al suministro de gas para cocinar.
Puerto Sudán había disfrutado de una relativa calma desde que estalló repentinamente la guerra civil entre el ejército y las RSF en abril de 2023. La ciudad del mar Rojo se convirtió en la base del gobierno alineado con el ejército después de que el RSF arrasó gran parte de la capital, Jartum, al inicio del conflicto.
Cientos de miles de desplazados también han buscado refugio en la ciudad, donde funcionarios, diplomáticos y organismos de la ONU también han establecido su cuartel general, convirtiéndola en la base principal de las operaciones de ayuda.
En el interior de Puerto Sudán, el ataque a la subestación eléctrica provocó un apagón en toda la ciudad, mientras unidades del ejército se desplegaban alrededor de los edificios públicos, según el testigo.
(Escrito por Nafisa Eltahir, Yomna Ehab y Angus McDowall; editado en español por María Bayarri y Carlos Serrano)