Por Stefania Spezzati, Jesús Aguado, Lawrence White y Elisa Martinuzzi
LONDRES (Reuters) – Los supervisores del Banco Central Europeo (BCE) están pidiendo a algunos de las entidades financieras del continente que evalúen su necesidad de dólares estadounidenses en tiempos de estrés, ya que se plantean escenarios en los que no pueden confiar en recurrir a la Reserva Federal bajo el Gobierno de Trump, dijeron tres personas con conocimiento de las discusiones.
Casi una quinta parte de las necesidades de financiación de los bancos de la zona del euro están denominadas en dólares estadounidenses, y las entidades piden prestado en mercados de financiación a corto plazo que pueden cerrarse abruptamente en momentos de tensión financiera. En el pasado, los bancos centrales europeos pedían prestados dólares a la Reserva Federal, fuente de la divisa, para compensar el déficit.
La Reserva Federal tiene líneas de crédito con el BCE y otros grandes bancos para aliviar la escasez de la moneda de reserva mundial y evitar que las tensiones financieras se extiendan a Estados Unidos.
Dos de las fuentes cercanas a las discusiones de supervisión del BCE dijeron que la Fed nunca había insinuado —ni siquiera ahora— que no mantendría esas líneas de apoyo.
Aun así, dado el cuestionamiento del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de los acuerdos comerciales y de defensa que mantiene desde hace tiempo con aliados europeos y la desconfianza que genera, existe la preocupación de que la posición de la Fed pueda cambiar, dijeron las fuentes, que solicitaron el anonimato para hablar con franqueza sobre la supervisión bancaria, un asunto sensible.
Por ello, los supervisores del BCE están solicitando con carácter de urgencia que las entidades bancarias de la región evalúen las lagunas de sus balances, por ejemplo, cuando han prestado dólares a clientes y financiado otros activos denominados en dólares pero no disponen de financiación suficiente o fiable en esa moneda para hacer frente a sus pasivos, dijo una de las fuentes.
Están presionando a algunos bancos de la zona del euro para que reduzcan estos desfases y, en algunos casos, exigiéndoles que consideren la posibilidad de cambiar algunas de sus actividades para estar menos expuestos a la financiación en dólares, dijo esta persona.
El BCE declinó hacer comentarios. La Casa Blanca no respondió a una petición de comentarios.
La Fed también declinó hacer comentarios y se remitió a un discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, en abril, en el que dijo que el banco central sigue dispuesto a proporcionar dólares a sus contrapartes. “Queremos asegurarnos de que los dólares estén disponibles”, dijo Powell.
Aunque la Fed es independiente de la Casa Blanca, Trump ha criticado frecuente y abiertamente a Powell, cuyo mandato termina dentro de un año, lo que ha llevado a algunos a preocuparse por la posibilidad de una Fed menos independiente en el futuro.
(Información adicional de Francesco Canepa y Tom Sims en Fráncfort; edición de Paritosh Bansal y Hugh Lawson; edición en español de Jorge Ollero Castela)