(Reuters) – La volatilidad del mercado financiero de abril, impulsada por el anuncio del gobierno de Donald Trump de aranceles inesperadamente altos, no dio lugar al tipo de disfunción del mercado estadounidense desencadenada por la pandemia de COVID-19, dijo la gobernadora de la Reserva Federal, Lisa Cook.
No obstante, la funcionaria agregó el viernes que la experiencia ayudará a “perfeccionar nuestra evaluación en curso” de la estabilidad del sistema financiero.
Los mercados del Tesoro funcionaron “de forma ordenada” pese al descenso de la liquidez, ya que los inversores se apresuraron a vender deuda estadounidense, y los mercados de deuda corporativa no sufrieron excesivas tensiones, señaló.
“El episodio ofreció un ejemplo real de las grandes caídas de los precios de los activos y de los repentinos estallidos de volatilidad que pueden derivarse de las crisis cuando las valoraciones de los activos son exageradas, así como de la importancia de unos mercados de financiación estables y resistentes para absorber las crisis”, agregó.
Según Cook, las llamadas sobre los resultados corporativos y los contactos de la Fed con el mercado sugieren que las empresas están preocupadas por el aumento de la incertidumbre, un mayor riesgo de desaceleración económica y las perspectivas de una inflación más alta, aunque desde mediados de abril “parte de esta incertidumbre ha disminuido”.
(Reporte de Ann Saphir; editado en español por Javier Leira)