Por Parisa Hafezi y John Irish
DUBÁI (Reuters) -Irán podría pausar el enriquecimiento de uranio si Estados Unidos libera los fondos congelados y reconoce el derecho de la república islámica a refinar uranio para uso civil en el marco de un “acuerdo político” que podría conducir a un pacto nuclear más amplio, afirmaron dos fuentes oficiales iraníes.
Las fuentes, próximas al equipo negociador de su país, dijeron el miércoles que “pronto podría alcanzarse un entendimiento político con Estados Unidos” si Washington acepta sus condiciones. Una persona dijo que el asunto “no se ha discutido todavía” durante las conversaciones.
Las fuentes dijeron a Reuters que, según este acuerdo, Teherán detendría el enriquecimiento de uranio durante un año, enviaría parte de sus existencias altamente enriquecidas al extranjero o las convertiría en placas de combustible para fines nucleares civiles.
Una pausa temporal al enriquecimiento sería una forma de superar un punto muerto tras cinco rondas de conversaciones entre el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araqchi, y el enviado de Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff, para resolver la disputa sobre el programa nuclear de Teherán.
Funcionarios estadounidenses han dicho en repetidas ocasiones que cualquier nuevo acuerdo nuclear con Irán debe incluir un compromiso para desechar el enriquecimiento, visto como un camino potencial para desarrollar bombas nucleares.
Irán ha negado en repetidas ocasiones tales intenciones, afirmando que desea energía nuclear únicamente para fines civiles, y ha rechazado públicamente la exigencia de Washington de eliminar el enriquecimiento como un ataque a su soberanía nacional.
En Washington, un funcionario estadounidense dijo a Reuters que la propuesta dada a conocer por las fuentes iraníes no había sido llevada a la mesa de negociaciones hasta la fecha. El Departamento de Estado de Estados Unidos no respondió inmediatamente a las peticiones de comentarios.
La agencia de noticias semioficial iraní Fars dijo que el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Esmaeil Baghaei negó el reporte de Reuters y afirmó que “el enriquecimiento en Irán es un principio no negociable”.
Las fuentes iraníes dijeron que Teherán no aceptaría el desmantelamiento de su programa o infraestructura nuclear ni el sellado de sus instalaciones nucleares, como exige el Gobierno de Donald Trump.
En cambio, dijeron, Trump debe reconocer públicamente el derecho soberano de Irán al enriquecimiento como miembro del Tratado de No Proliferación nuclear y autorizar una liberación de los ingresos petroleros iraníes congelados por las sanciones, incluidos 6.000 millones de dólares en Qatar.
Irán aún no ha podido acceder a los 6.000 millones de dólares que fueron descongelados en virtud de un canje de prisioneros entre Estados Unidos e Irán en 2023, durante el Gobierno de Joe Biden.
“Teherán quiere que sus fondos se transfieran a Irán sin condiciones ni limitaciones. Si eso significa levantar algunas sanciones, entonces también debe hacerse”, dijo la segunda fuente.
Las fuentes señalaron que el acuerdo político daría a la actual diplomacia nuclear una mayor oportunidad de obtener resultados al proporcionar más tiempo para alcanzar un consenso sobre las cuestiones difíciles de salvar necesarias para un tratado permanente.
“La idea no es llegar a un acuerdo provisional, sino más bien a un acuerdo político que demuestre que ambas partes desean rebajar la tensión”, declaró la segunda fuente iraní.
Los diplomáticos occidentales se muestran escépticos sobre las posibilidades de una reconciliación entre Estados Unidos e Irán en materia de enriquecimiento.
Advierten de que un acuerdo político temporal enfrentaría la resistencia de las potencias europeas a menos que Irán mostrara un compromiso serio de reducir su actividad nuclear con la verificación del organismo de control nuclear de la ONU.
(Reporte adicional de Steve Holland en Washington, escrito por Parisa Hafezi. Editado en español por Javier Leira)
