BRASILIA, 24 jul (Reuters) -El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil decidió el jueves no ordenar la detención del expresidente Jair Bolsonaro por lo que calificó como una violación “aislada” de las restricciones impuestas la semana pasada, pero advirtió de que podría ser encarcelado por futuras infracciones.
El juez Alexandre de Moraes, que supervisa el caso en el que Bolsonaro está acusado de conspirar para dar un golpe de Estado, mantuvo las órdenes de restricción que impuso al expresidente y aclaró que no se le prohíbe dar entrevistas.
La semana pasada, Moraes ordenó a Bolsonaro que llevara una tobillera electrónica y dejara de usar las redes sociales por las acusaciones de que había solicitado la intervención del presidente estadounidense Donald Trump, quien vinculó los nuevos aranceles a Brasil con lo que calificó de “caza de brujas” contra su aliado.
El lunes, el juez amenazó a Bolsonaro con detenerlo, alegando que había incumplido las restricciones sobre el uso de las redes sociales —incluso a través de terceros— cuando habló con periodistas en Brasilia.
Moraes escribió en su decisión del jueves que “no hay duda” de que la orden no se ha cumplido, afirmando que el hijo de Bolsonaro, Eduardo, que se encuentra en Estados Unidos para recabar apoyos para su padre en Washington, publicó las declaraciones del expresidente en las redes sociales para beneficiarlo.
Pero añadió que, dado que el incumplimiento era “aislado”, no requería una orden de arresto.
(Reporte de Ricardo Brito; Escrito por Gabriel Araujo, Editado en español por Juana Casas y Javier Leira)