Por Krystal Hu y Shivani Tanna
5 ago (Reuters) – OpenAI, el fabricante de ChatGPT, se encuentra en la fase inicial de conversaciones para una venta de acciones que permitiría a los empleados cobrar en efectivo y podría valorar la empresa en unos 500.000 millones de dólares, según una fuente familiarizada con el asunto.
La venta pondría de relieve el rápido aumento de usuarios e ingresos de OpenAI, así como la intensa competencia entre las empresas de inteligencia artificial para conseguir trabajadores con talento.
La operación, antes de una posible salida a bolsa, permitiría a empleados actuales y antiguos vender acciones por valor de varios miles de millones de dólares, según la fuente, que pidió el anonimato porque las conversaciones son privadas.
Impulsada por su producto estrella ChatGPT, OpenAI duplicó sus ingresos en los siete primeros meses del año, alcanzando un total anualizado de 12.000 millones de dólares, y va camino de los 20.000 millones este año, añadió la fuente.
OpenAI, respaldada por Microsoft, cuenta con unos 700 millones de usuarios activos semanales de sus productos ChatGPT, lo que supone un aumento con respecto a los 400 millones de febrero.
Las conversaciones sobre la venta de acciones se dan poco después de una ronda de financiación primaria de OpenAI anunciada a principios de este año, cuyo objetivo es recaudar 40.000 millones de dólares, liderada por el grupo japonés SoftBank.
SoftBank tiene hasta finales de año para financiar su parte de 22.500 millones de dólares de la ronda, pero el resto se ha suscrito con una valoración de 300.000 millones de dólares, según la fuente.
Los gigantes tecnológicos están compitiendo agresivamente por el talento en IA con lucrativos paquetes de compensación. Meta está invirtiendo miles de millones en Scale AI para hacerse con su presidente ejecutivo Alexandr Wang, de 28 años, para que dirija su nueva unidad de superinteligencia.
Empresas que no cotizan en bolsa como ByteDance, Databricks y Ramp también han recurrido a la venta privada de acciones para actualizar la valoración de la empresa y recompensar a los empleados.
(Krystal Hu en Nueva York y Shivani Tanna en Bengaluru. Edición en español de Javier López de Lérida)