Por Roberto Samora y Kylie Madry
SAO PAULO, 27 ago (Reuters) – El aumento de los aranceles de Estados Unidos a Brasil modificará los flujos comerciales mundiales de carne de vacuno, provocando un aumento de los envíos a la mayor economía del mundo de países como México y Australia, mientras el país sudamericano busca mercados alternativos, dijeron analistas el miércoles.
Brasil es el mayor exportador mundial de carne de vacuno, siendo China su principal socio comercial. En agosto, México superó a Estados Unidos para convertirse en su segundo mayor destino de exportación de este producto.
“Es muy probable que los países que puedan triangular la carne brasileña aumenten sus compras siguiendo el ejemplo de México”, dijo en una entrevista Mauricio Nogueira, director de la consultora ganadera Athenagro.
“Si México empieza a enviar carne de res a Estados Unidos, tendrá que comprarle a alguien, tendrá que comprar de aquí”.
Argentina sería otro candidato para importar y eventualmente reexportar la carne de vacuno de Brasil a Estados Unidos, añadió.
Nogueira no cambió su proyección de fin de año para las exportaciones de carne de res de Brasil después de que los aranceles del 50% de Trump sobre los productos del país entraron en vigor el 6 de agosto. Su consultora proyecta un aumento del 7,5% este año en las exportaciones de carne de res brasileña, a 3,08 millones de toneladas métricas. Hasta julio, esas exportaciones aumentaron más del 13%.
Luis Rua, secretario de Comercio del Ministerio de Agricultura brasileño, afirmó que la carne de vacuno brasileña ayuda a mantener bajo control la inflación mexicana. No está claro si México reexportará suministros de Brasil.
“La enviamos a México, pero no sabemos exactamente qué hará México con la carne”, dijo a Reuters.
El economista Thiago de Carvalho confirmó las expectativas de un cambio en los flujos mundiales de carne de vacuno, con Brasil vendiendo potencialmente a mercados previamente servidos por exportadores australianos, por ejemplo.
Factores como la escasez de oferta mundial de carne de vacuno, a la que se enfrenta Estados Unidos después de que su cabaña ganadera alcanzara mínimos históricos, también podrían dirigir la demanda hacia Brasil, añadió Carvalho.
Japón, que tradicionalmente compra carne a Estados Unidos, podría abrirse pronto a los productos brasileños, dijo.
(Reporte de Roberto Samora en São Paulo y Kylie Madry en Ciudad de México; Escrito por Ana Mano; Editado en español por Juana Casas)