Por David Lawder
WASHINGTON, 6 feb (Reuters) – China presentó el miércoles una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra el nuevo arancel del 10% del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a las importaciones chinas y su cancelación de una exención libre de impuestos para paquetes de bajo valor, con el argumento de que las medidas son “proteccionistas” e incumplen las normas de la OMC.
La petición de Pekín de consultas comerciales con Estados Unidos se produjo cuando reinaba la confusión entre transportistas y minoristas por el cierre por parte de Trump de la exención “de minimis” para las importaciones de paquetes valorados en menos de 800 dólares (770 euros), ampliamente utilizada por empresas de comercio electrónico como Shein, Temu y Amazon.
Un funcionario de Aduanas y Protección Fronteriza dijo que todos los paquetes pequeños procedentes de China y Hong Kong requerían registrar su entrada en la aduana en un archivo antes de la llegada y que existía la posibilidad de que algunos cargamentos fueran devueltos sin este papeleo.
La OMC dijo que China presentó una solicitud de consultas con Estados Unidos sobre los aranceles. China argumenta en el documento que los nuevos aranceles de Trump destinados a detener el flujo de opioides de fentanilo y sus precursores químicos a Estados Unidos “se imponen sobre la base de alegaciones infundadas y falsas relativas a China”.
Afirmó que los derechos son discriminatorios, ya que solo se aplican a las mercancías de origen chino, y son incompatibles con las obligaciones de EEUU en la OMC.
La solicitud de consultas es el inicio de un proceso contencioso que podría desembocar en una resolución que dictamine que los aranceles de Trump violan las normas comerciales, del mismo modo que lo concluyó una resolución de la OMC de 2020 con respecto a los aranceles del primer mandato del presidente estadounidense.
Sin embargo, es improbable que una victoria de este tipo suponga un alivio para Pekín, dado que el Órgano de Apelación de la OMC lleva años prácticamente inoperante, debido a que Estados Unidos ha bloqueado el nombramiento de jueces de apelación por lo que considera una extralimitación judicial del organismo. Esto ha impedido una decisión final en el caso de 2020.
CAOS EN LOS PAQUETES
El Servicio Postal de Estados Unidos dijo el miércoles que volvería a aceptar paquetes de China y Hong Kong, revirtiendo una suspensión temporal que amenazaba con interrumpir millones de importaciones de paquetes cada día.
“Todos estamos corriendo como pollos sin cabeza en este momento, tratando de adivinar qué va a pasar”, dijo Martin Palmer, cofundador de Hurricane Commerce, un proveedor de datos de comercio electrónico transfronterizo. “Y dentro de dos semanas puede que volvamos a la normalidad”.
La administración Trump ha culpado a la exención de minimis por permitir que el fentanilo y sus precursores químicos ingresen a Estados Unidos sin ser examinados. Informaciones recientes de Reuters también han descubierto que los narcotraficantes se están beneficiando de la exención.
USPS dijo en un comunicado que estaba trabajando con la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos para implementar un mecanismo de recolección eficiente para los nuevos aranceles de China para minimizar las interrupciones en las entregas.
Alrededor de 1.360 millones de envíos entraron en Estados Unidos utilizando la disposición de minimis en 2024, un 36% más que en 2023, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de EEUU.
INCERTIDUMBRE ARANCELARIA
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, defendió el miércoles la estrategia arancelaria de Trump en su primera entrevista con los medios de comunicación desde que asumió el cargo, diciendo que estaba dirigida a retornar la fabricación a Estados Unidos, incluso para las industrias que han abandonado en gran medida las costas estadounidenses.
El presidente de la Fed de Chicago, Austan Goolsbee, advirtió de que ignorar el posible impacto inflacionista de los aranceles sería un error, mientras que el presidente de la Fed de Richmond, Thomas Barkin, dijo que sigue siendo imposible en esta primera etapa saber en qué medida los aumentos de costes de cualquier arancel podrían ser absorbidos o trasladados a los consumidores.
(Información de David Lawder; edición de Lincoln Feast; edición en español de Jorge Ollero Castela)