SEÚL, 11 feb (Reuters) – El Ministerio de Defensa de Corea del Norte dijo el martes que Estados Unidos vuelve a suponer una grave amenaza para su seguridad al enviar un submarino nuclear a un puerto surcoreano y que sus fuerzas militares están preparadas para tomar las medidas que sean necesarias, informó la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA, por sus siglas en inglés).
La aparición de un submarino nuclear estadounidense en la península coreana es una “clara expresión de la invariable histeria estadounidense por la confrontación” contra Corea del Norte, afirmó en un comunicado un portavoz anónimo del Ministerio de Defensa del Norte.
“Expresamos nuestra grave preocupación por el peligroso acto militar hostil de EEUU que puede llevar la aguda confrontación militar en la región alrededor de la península coreana a un conflicto real de fuerzas armadas”, decía el comunicado recogido por la agencia de noticias KCNA.
Sus fuerzas armadas “ejercerán sin vacilar su legítimo derecho a castigar a los provocadores”, añadió, sin dar más detalles.
El Ministerio de Defensa de Corea del Sur dijo que el submarino USS Alexandria entró en el puerto de Busan el lunes para abastecer y para que su tripulación descansase. Añadió que será una oportunidad para que los soldados de ambos países promuevan el intercambio y la postura de defensa combinada.
Su ejército dijo que no tenía comentarios sobre el comunicado norcoreano.
El submarino estadounidense de ataque rápido y propulsión nuclear forma parte de la Flota del Pacífico de Estados Unidos, armada con misiles de crucero Tomahawk, según la armada estadounidense.
Corea del Norte critica habitualmente la presencia de medios militares estadounidenses y los ejercicios conjuntos de las fuerzas estadounidenses y surcoreanas. El domingo advirtió de “consecuencias indeseables” al criticar una serie de ejercicios realizados por los aliados.
El portavoz del Ministerio de Defensa del Norte no mencionó los ejercicios con fuego real que están realizando conjuntamente los ejércitos surcoreano y estadounidense en un campo de tiro al sur de la militarizada frontera coreana desde la semana pasada.
Corea del Norte ha intensificado su retórica agresiva desde que Donald Trump asumió el mes pasado su segunda presidencia, a pesar de los comentarios en los que decía que tendería la mano al líder norcoreano Kim Jong-un para entablar un diálogo directo.
(Información de Jack Kim; edición de Stephen Coates; edición en español de María Bayarri Cárdenas)