INDIAN WELLS, Estados Unidos, 5 mar (Reuters) – La excampeona del Abierto de Estados Unidos Emma Raducanu dijo que no podía ver la pelota entre sus lágrimas y que apenas podía respirar tras percatarse de la presencia de un acosador durante su partido en el Torneo de Dubái hace dos semanas.
Raducanu se mostró angustiada durante el primer set de su partido de segunda ronda contra Karolina Muchova y se quedó de pie detrás de la silla de la ábritra mientras el personal de seguridad sacaba al hombre.
La jugadora de 22 años se reincorporó entonces al partido y perdió 7-6(6) y 6-4.
“Obviamente, estaba muy angustiada”, dijo Raducanu a la prensa en Indian Wells, donde volverá, por primera vez desde la terrible experiencia, con más medidas de seguridad.
“Le vi en el primer juego del partido y pensé: ‘No sé cómo voy a terminar'”.
“Literalmente, no podía ver la pelota entre las lágrimas. Apenas podía respirar. Me dije: ‘Tengo que tomarme un respiro'”.
Raducanu dijo que el hombre se le había acercado dos veces fuera de la pista en Dubái y que también estuvo presente durante sus partidos en Singapur, Abu Dabi y Doha en las semanas anteriores.
La tenista decidió retirar los cargos contra el hombre, que había sido detenido por la policía de Dubái. Desde entonces, se le ha prohibido asistir a todos los torneos de la WTA.
“Fue un momento muy intenso”, añadió Raducanu, que se tomó una semana de descanso antes de volver al circuito.
“Después del partido rompí a llorar, pero no necesariamente por haber perdido. Había mucha emoción en las últimas semanas por los acontecimientos y necesitaba esa semana libre para tomarme un respiro y venir aquí”.
“Me siento mucho mejor”.
Raducanu, campeona del Abierto de Estados Unidos en 2021 y que ha caído hasta el puesto 55 de la clasificación mundial debido a problemas de forma física, jugará contra la japonesa Moyuka Uchijima en la primera ronda de Indian Wells. Una victoria le aseguraría un partido contra la tercera cabeza de serie, Coco Gauff.
(Información de Shrivathsa Sridhar en Bengaluru; edición de Edwina Gibbs; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)