Por Alvise Armellini
ROMA, 7 mar (Reuters) – Un grupo de migrantes eritreos que fueron retenidos en un buque guardacostas italiano durante 10 días en 2018 tienen derecho a una indemnización del Gobierno, ha dictaminado el máximo tribunal de apelaciones de Italia, lo que ha desatado la furia de la primera ministra, la líder derechista Giorgia Meloni.
El caso se refiere a más de 150 migrantes que en agosto de 2018 quedaron bloqueados en el mar en el buque guardacostas Diciotti cuando el entonces ministro del Interior, Matteo Salvini, se negó a dejarles desembarcar en el puerto siciliano de Catania.
Un número indeterminado de los migrantes, procedentes de Eritrea, solicitaron una indemnización y el jueves el Tribunal de Casación falló a su favor.
“Como resultado de esta decisión, el Gobierno tendrá que indemnizar —con el dinero de los ciudadanos italianos honrados que pagan impuestos— a las personas que intentaron entrar ilegalmente en Italia”, escribió Meloni en X el viernes.
“Tener que gastar dinero en esto, cuando no tenemos suficientes recursos para hacer todo lo que debería ser correcto hacer, es muy frustrante”, añadió.
En el episodio de 2018, Salvini acabó cediendo después de que Albania e Irlanda se ofrecieran a acoger a parte de los migrantes y la Iglesia católica italiana aceptara hacerse cargo del resto sin coste para el contribuyente.
La Casación anuló las decisiones de dos tribunales inferiores, que en 2019 y 2024 habían fallado en contra de los migrantes.
“Las medidas del Gobierno nunca pueden considerarse exentas de revisión judicial cuando van más allá de los límites impuestos por la Constitución y la ley”, dijo el tribunal de apelaciones.
Los fiscales habían intentado en 2018 investigar a Salvini por abuso de poder y secuestro de los migrantes, pero el Senado italiano les denegó el permiso, lo que puso fin al caso.
Salvini es ahora vice primer ministro y ministro de Transporte en el Gobierno de Meloni, que ha adoptado una línea dura en materia de inmigración y se ha enfrentado varias veces con el poder judicial, entre ellos a cuenta de un plan estancado para enviar migrantes por mar a Albania.
(Información de Alvise Armellini, edición de Gavin Jones y Angus MacSwan, edición en español de Jorge Ollero Castela)
