13 abr -El expresidente brasileño Jair Bolsonaro se estaba recuperando tras haber sido sometido el domingo a una operación quirúrgica, la quinta intervención desde que fue apuñalado en el estómago mientras hacía campaña en 2018, informó su esposa, Michelle, en una publicación en redes sociales.
“La cirugía concluyó con éxito”, posteó. “Mi corazón desborda de agradecimiento por cada uno de ustedes que han estado orando”.
El procedimiento comenzó a las 08:30 hora local (1130 GMT) y se esperaba que durara seis horas, pero se prolongó durante unas 12 horas debido a la complejidad de la cirugía.
El equipo médico dijo en un informe que el procedimiento había ido bien y que el expresidente estaba estable, sin dolor, y se encontraba en la unidad de cuidados intensivos.
Se espera que los médicos del líder ultraderechista hablen con los periodistas el lunes por la mañana, dijo la oficina de prensa del hospital.
Bolsonaro, de 70 años, fue hospitalizado el viernes tras sentir un fuerte dolor abdominal durante un acto con simpatizantes en el noreste de Brasil, lo que le obligó a interrumpir una gira regional destinada a recabar apoyo político. El sábado por la noche fue trasladado a la capital del país, Brasilia, donde reside.
Bolsonaro, un ex capitán del Ejército que fue presidente de 2019 a 2022, ha estado haciendo campaña por Brasil para que el Congreso apruebe un proyecto de ley de amnistía para sus partidarios que irrumpieron en la capital después de que perdió las elecciones de 2022.
En un mensaje a sus aliados antes de la operación, el expresidente criticó el duro trato contra un simpatizante que podría ser condenado a 10 años de prisión y volvió a pedir que el Congreso apruebe el proyecto de ley de amnistía.
“Que Dios ilumine a cada uno de los 513 diputados y 81 senadores en sus votos”, escribió. “Si con nuestras decisiones pavimentamos nuestra eternidad, este voto tiene un peso significativo”.
El Tribunal Supremo de Brasil decidió el mes pasado llevar a Bolsonaro a juicio por supuestamente conspirar para derrocar al Gobierno tras su derrota electoral de 2022. Él ha negado cualquier delito y calificó el juicio como un ejemplo de “lawfare” o uso de la judicatura contra líderes políticos como él y la francesa Marine Le Pen.
Bolsonaro ya tiene prohibido presentarse a las elecciones hasta 2030 por desacreditar el sistema de votación del país. Si el Tribunal Supremo lo declara culpable, podría enfrentarse a una larga pena de prisión.
Aun así, insiste en que se presentará a las elecciones presidenciales del año que viene, presentándose como el mejor candidato para enfrentar a Luiz Inácio Lula da Silva, cuya popularidad ha caído en picada debido a la elevada inflación.
(Reporte de Rodrigo Viga y Ricardo Brito. Edición en español de Javier López de Lérida y Javier Leira)