Por Lisa Baertlein
LOS ÁNGELES (Reuters) – El director del puerto con más tráfico de Estados Unidos no espera que las importaciones se disparen tras la tregua arancelaria de la semana pasada entre Washington y Pekín, que rebajó temporalmente el arancel del 145% al 30%.
“No verán un diluvio de carga aquí en el Puerto de Los Ángeles”, dijo Gene Seroka, director ejecutivo del puerto que también es el número uno en comercio con China, en una sesión informativa el lunes.
“Lo que veremos es un ligero repunte de las reservas en Asia”, dijo Seroka sobre las reservas en buques de carga con destino al puerto.
Es probable que ese aumento se deba a que los importadores están comprando cargamentos fabricados antes de que Estados Unidos impusiera los aranceles del 145% el mes pasado, más que a nuevos pedidos que podrían no estar listos cuando finalice la prórroga de 90 días, dijo.
El puerto de Los Ángeles y el adyacente puerto de Long Beach gestionan el 31% del comercio marítimo estadounidense y son un barómetro de la actividad económica del país. Manejan todo tipo de mercancías, desde juguetes, prendas de vestir y piezas de automóviles hasta algodón en bruto y piensos para animales y mascotas.
El repunte del volumen que se avecina se produce tras una fuerte caída de las reservas después de que Estados Unidos impusiera el 9 de abril aranceles del 145% a China, su mayor socio comercial marítimo.
Los efectos tardan unas semanas en manifestarse en los puertos estadounidenses, por lo que las importaciones de mayo reflejan la escalada a aranceles del 145%.
Durante los primeros 15 días de este mes, 74 portacontenedores llegaron a los puertos de Los Ángeles y Long Beach, 11 menos de lo habitual, según datos de Marine Exchange of Southern California.
“Es probable que la caída del volumen de mayo sea sustancial cuando cerremos los libros de este mes”, dijo Seroka, que declinó hacer una previsión concreta.
(Reportaje de Lisa Baertlein; Edición de Sandra Maler, Editado en español por Juana Casas)