LISBOA (Reuters) – Portugal está preocupado por la excesiva dependencia de España en su sector bancario y considera que la adquisición de su cuarto mayor prestamista, Novo Banco, por parte de un banco español sería contraria a los intereses del país, según ha declarado su ministro de Finanzas en funciones.
Según los medios de comunicación españoles, Caixabank , propietario del quinto mayor banco de Portugal, BPI, estaba sopesando una oferta por Novo Banco, aunque el banco español no ha hecho comentarios al respecto.
“Los bancos españoles ya representan aproximadamente un tercio del mercado bancario portugués y, por razones de concentración y dependencia, esta cifra no debería aumentar”, declaró Joaquim Miranda Sarmento a la emisora RTP a última hora del miércoles.
“Es de interés para el país que no haya una excesiva dependencia o concentración de nuestro sector bancario en manos de bancos de un solo país como España”, dijo, sin detallar por qué sería preocupante.
Novo Banco, que no cotiza en bolsa y pertenece en un 75% al fondo de capital riesgo estadounidense Lone Star, inició en febrero los preparativos para una oferta pública inicial del 25%-30% de su capital, pero no se descarta una venta total.
Miranda Sarmento declaró que corresponde al accionista mayoritario, Lone Star, decidir si sacar a bolsa el banco o venderlo. El 25% restante está en manos de un fondo de resolución financiado por los bancos portugueses y el Estado.
Aunque esta participación no permite al Estado bloquear la operación, sería difícil cerrarla sin su consentimiento.
El pasado mes de junio, el director general de la entidad estatal Caixa Geral de Depositos (CGD), Paulo Macedo, declaró que el mayor banco de Portugal estaba considerando la posibilidad de comprar otra entidad para preservar su liderazgo en el mercado frente a la expansión de los bancos extranjeros, en particular los españoles.
En caso de que el CGD presentara una oferta “solo o junto con otro banco” por Novo Banco, el Estado portugués tendría la última palabra sobre la transacción en tal escenario, dijo Miranda Sarmento.
Los cinco principales bancos portugueses, entre los que también figuran Millennium bcp y la filial portuguesa del español Santander , controlan más del 80% de los activos bancarios del país.
(Información de Sergio Gonçalves; información adicional de Jesús Aguado en Madrid; edición de Charlie Devereux y Tomasz Janowski; editado en español por Paula Villalba)