WASHINGTON, 18 jul (Reuters) -El Gobierno de El Salvador enviará a Caracas a venezolanos detenidos a cambio de estadounidenses retenidos en Venezuela, dijeron el viernes a Reuters dos funcionarios del gobierno de Washington, mientras Venezuela anunció el regreso de siete niños migrantes que habían sido separados de sus familias.
Uno de los funcionarios dijo que El Salvador enviaría a Caracas a 238 venezolanos recluidos en su prisión de máxima seguridad Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) y que el Gobierno venezolano liberaría a cinco ciudadanos estadounidenses y a cinco residentes permanentes en Estados Unidos para su custodia.
El segundo funcionario confirmó que el intercambio estaba teniendo lugar y dijo que las cifras parecían acercarse a lo esperado.
Algunos familiares de migrantes detenidos en el CECOT dijeron que recibieron llamadas del gobierno para viajar a Caracas.
El ministerio de Comunicación e Información de Venezuela y la Presidencia de El Salvador no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
El Departamento de Estado declinó hacer comentarios. La Casa Blanca y el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
En Venezuela, el ministro del Interior, Diosdado Cabello, dijo el viernes desde el aeropuerto internacional que siete niños migrantes retornaron al país.
Agregó que “en la tarde nos vamos a ver aquí (en el aeropuerto) porque tenemos más movimiento” en la terminal, pero no mencionó el caso de los detenidos en El Salvador, ni a los estadounidenses.
Los menores eran parte de un grupo de 251 venezolanos que llegaron deportados en un vuelo desde Houston, dijo Cabello.
Desde inicios de año han llegado al país en 45 distintos vuelos más de 8.200 venezolanos, según las autoridades.
Los venezolanos fueron enviados a El Salvador en marzo después de que el presidente Donald Trump invocara la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798 para deportar rápidamente a presuntos miembros de la pandilla Tren de Aragua sin pasar por los procedimientos normales de inmigración.
Los familiares de muchos de los venezolanos y sus abogados niegan que tuvieran vínculos con las pandillas y dicen que no se les dio la oportunidad de refutar las acusaciones del Gobierno de Trump en los tribunales.
El Gobierno de Venezuela siempre ha denunciado la detención de sus ciudadanos por parte del CECOT como una violación de los derechos humanos y del derecho internacional. Pero sus críticos dicen que el país mantiene a activistas y figuras de la oposición en condiciones similares en la nación sudamericana.
(Reporte de Ted Hesson y Aram Roston; reporte adicional de Julia Symmes Cobb en Bogotá; Edición en español de Raúl Cortés Fernández y Natalia Ramos)